
Entrevista a Zirconita: «Más que un viaje musical no deja de ser un viaje creativo, un viaje de un grupo que va creciendo y evolucionando.”
Hace unos días pasamos por las oficinas de All Sounds para charlar con Iván Anés y David Pintado, vocalista y bajista respectivamente de la banda Zirconita, quienes acaban de estrenar un nuevo trabajo de larga duración que lleva por título Paradero.
1. Sobre Zirconita
“Hemos elegido quedarnos con las mejores partes y ayudarnos a estructurar en la progresión de las canciones”
A modo de introducción biográfica para poner su último trabajo en contexto, os contamos que Zirconita tiene su origen en 2011-2012 con la formación de la banda Several Prizes, con un sonido de rock más clásico cantado en inglés. Tras dos EP, en 2018 se publica AMAGO, el primer trabajo ya como Zirconita, en la que además de cantar en la lengua materna se empiezan a notar en la producción unos aires más oscuros con distorsiones más marcadas en los instrumentos. Hace unas semanas se ha publicado Paradero, el primer LP de la banda con 10 temas que continúan ese camino sonoro.
Ya han comentado varias veces en otras entrevistas que el cambio de idioma se debió entre otras cosas a la necesidad de conectar el mensaje con el público de manera más directa. Quisimos saber si ese cambio sonoro estuvo relacionado con el cambio de idioma, o la evolución que ha seguido el estilo y las melodías ha sido independiente de la lengua. Iván nos aclara que el cambio de la letra, en caso de afectar a algo, lo hizo más a nivel de estructura de los temas que de su propia sonoridad. Por ejemplo, comenta que mientras en inglés la abundancia de palabras llanas dotan los versos de muchas fuerza y versatilidad, en castellano este cambio les ha obligado a centrarse más en el orden de las estructuras. “Hemos elegido quedarnos con las mejores partes y ayudarnos a estructurar en la progresión de las canciones”, “Y yo creo que Iván transmite mucho más cantando en su idioma” añade David. “Para mí es más placentero al final en castellano precisamente porque te vacías mucho más, hay más de ti” aclara Iván.
2. Sobre Paradero
Por su parte, un poco de esa evolución musical se debe a la producción del disco, realizada por Manuel cabezal y Víctor Cabezuelo (componente de Rufus T.Firefly), como apunta el mismo Iván: “Cada producción es una masterclass”, a lo que David añade: “Ha sido ir creciendo, ir evolucionando con todos los sonidos, con todo lo que hemos ido aprendiendo y eso para conseguir llegar a donde hemos llegado”.
“Me gusta que la melodía no entienda de lenguas”
Quisimos saber si además de en la música en sí, ese estudio o investigación se ha podido ver reflejado con las letras más introspectivas. “Es más emocional y menos cerebral”, indica Iván, quien admite que sus compañeros le dejan libertad en cuanto a poder volcar sus intimidades y pensamientos en las letras de los temas. Además, nos cuentan que en el proceso de composición primero suelen trabajar con la melodía a la que posteriormente dotan de mensaje “Me gusta que la melodía no entienda de lenguas”, matiza. Además, en este trabajo han tenido un pequeño inconveniente: “Lo que son las letras se han alimentado un poco del flujo de todo lo que surge después de esa composición, de poner en común, luego incluso ha habido cosas que han salido después de estar ya en plena producción. No vamos a negar también que nos ha pillado precisamente este confinamiento y separó la grabación de la parte instrumental con la parte de la grabación de la voz, y algunas cosas las cambié a posteriori”.
Esto nos lleva a preguntar precisamente por qué nivel de cambios se pudieron producir entre el planteamiento inicial y el resultado del estudio de grabación, a lo cual nos confiesan que por ejemplo “SOS”, cuarta pista del trabajo que ya nos presentaron antes de su lanzamiento a modo de single, cambió completamente su estribillo durante el confinamiento porque sentía que ya no tenía nada que ver con él el mensaje anterior “Y la canción subió al doble” añade David.
“Creo que el trabajo que hacen ellos instrumentalmente es muy sincero y yo lo que quiero quedarme es precisamente a gusto también, que si tengo que subirme a un escenario, que lo que diga me lo crea”.
Además, siguiente con el caso de “SOS”, admiten que no solo la letra cambió sino también su estructura y melodía, esto nos lleva a preguntarse si serán entonces del grupo de artistas que son muy críticos con su trabajo anterior y se les ocurren cambios que hubiesen hecho a posteriori de los mismos: “Alguna sí”, responden ambos. sin embargo, David nos cuenta que en parte eso es el motor del cambio y la evolución: “Lo bueno es que nos salen cosas que nuevas. Las sonoridades y las cosas que hemos hecho de antes nos ayudan precisamente a hacer las de ahora. es decir, esos cambios que meteríamos y tal, pues en la siguiente canción las metemos.”
Por otra parte, ese estilo musical (rock oscuro con aires psicodélicos) se ve también reflejado la imagen física. Después de todo, cuando un elemento artístico trata de reflejar un concepto, lo tiene que proyectar en sus diferentes facetas, y el arte del disco que es obra de Julia Martín (Rufus T. Firefly) no iba a ser menos. A raíz de esto, David nos cuenta la idea detrás del concepto: “Un paradero es el sitio donde vas cuando llegas, y es el principio de los viajes que te van a pasar”, contando con esta metáfora que sienten este último trabajo como el resultado de todos los sonidos, trabajos, las implementaciones que han ido incorporando en a lo lardo de los años, y que ven también como el comienzo de algo nuevo. que va a evolucionar.
“Más que un viaje musical no deja de ser un viaje creativo, un viaje de un grupo que va creciendo y evolucionando.”
Ivan nos remonta al trabajo anterior “AMAGO era un poco una declaración de intenciones, y la verdad es que no lo habíamos pensado inicialmente así, pero sí es verdad que en busca de ese sonido en el que estamos, al final más que un viaje musical no deja de ser un viaje creativo, un viaje de un grupo que va creciendo y evolucionando.” Para añadir ese halo de misterio, añaden que precisamente el paradero al que están llegando no saben cuál es aún, es decir, saben que tienen un paradero, pero desconocen dónde está. “Ahí es donde estamos, en un sonido que va cogiendo forma que se está abriendo a determinadas ideas.”
Hablamos también sobre las ideas que tendrían para la puesta en escena del disco, cuando fuesen posibles las circunstancias, y recordando anécdotas mencionan lo que en estos momentos parece tan utópico de los conciertos con gene abrazada o los festivales en los que casi se compartía el sudor con el compañero de al lado (Para ponernos en contexto por si alguien nos lee desde el futuro porque esté haciendo por ejemplo un trabajo para el cole sobre la banda Zirconita, os comentamos de que estamos a finales de 2020 donde las medidas para combatir el coronavirus han obligado a restringir en número y condiciones los conciertos de música. Fin del comentario cronológico). Comparan entonces la idea que tendrían en mente con los directos de Rufus T.Firefly, en los que comentan que sienten tanto las canciones como la puesta en escena están relacionadas ofreciendo una experiencia musical completa, “Que el público entienda un poco toda la creatividad y la magia que tiene este disco”, matiza Iván.
3. Sobre las canciones
Hablando sobre algunas canciones en concreto, Paradero empieza de manera suave, con “Lejos”, con esa atmósfera esotérica y psicodélica que poco a poco va aumentando el ritmo rockero según avanza el disco hasta volver a despedirse de manera suave con “Marte”. Precisamente la idea que ellos planteaban es la del viaje que te va llevando por esos diferentes caminos como si fuese una sola canción con diez partes. “Acaba muy bien para volver a empezarlo”, añade Iván. Además, admiten que han colocado en los primeros lugares las que consideran de escucha más fácil para alguien que no siguiese su trabajo y así le que sirviese de introducción o gancho para el resto del disco.
“Ahora puedo trabajar con esa canción, ahora puedo mirar a los ojos y estar con los pies en la tierra y disfrutar, pero antes esto hubiera sido imposible.”
Preguntamos también si hay algún tema que por su temática más profunda o dolorosa les pudiese causar un poco de dolor a la hora de ponerlo en directo, una especie de relación amor-odio con la misma. Iván nos lo niega contándonos el ejemplo de “Marte”, tema que cierra Paradero: “Por ejemplo Marte llevaba la idea hecha siete años a lo mejor, no exagero, y en cambio ha sido ahora cuando hemos tenido la oportunidad de que saliera a la palestra, que tiráramos para adelante, y es ahora cuando me he atrevido a hacerle la letra. Y “Lejos” pues llevábamos dos años con ella también”, asegurando que en el momento que ya están compuestas es que están preparadas para ser mostradas.
Nos cuenta también que en su formación teatral Iván aprendió que no se deben trabajar con cosas que te produzcan bloqueo, que te impidan avanzar. “Yo no hubiera querido jambas que hubiera salido Marte si no hubiera pasado el tiempo que ha pasado. Ahora puedo trabajar con esa canción, ahora puedo mirar a los ojos y estar con los pies en la tierra y disfrutar, pero antes esto hubiera sido imposible.” Y es que es fácil percibir con “Marte” cierto dolor, siendo un tema que llama la atención antes incluso de escucharlo, fijándonos por ejemplo en su duración (más de seis minutos de canción).
Además, aunque personalmente “Erosión” y “Cielo Negro” se encuentran entre mis favoritas del disco, fue “Marte» la que desde el primer momento me llamó la atención como acabamos de comentar, y además hablamos con nuestros protagonistas que a un servidor le recordaba en cierta forma a “Aire” de Mecano. Quizá se deba a esa atmósfera íntima, mística y envolvente que invita a la soledad con estos tintes oscuros y depresivos, o por ese sonido más electrónico, sin olvidar que el de Mecano se trata también de un tema largo para su época (cuatro minutos y medio de canción).
4. Epílogo
“Es una película muy gorda la que estamos viviendo aunque la estemos normalizando”
Para ir acabando y cambiando de tema, les preguntamos por si han sentido la llamada de la creatividad durante el pasado confinamiento, en el que parece que ha habido dos vertientes artísticas: la llegada de la inspiración desmedida o el reposo y desconexión artísticas para recargar fuerzas. “Yo es que no puedo estar quieto” admite Iván, quien además confiesa que se va grabando notas y audios en el móvil en cualquier momento y lugar. “El confinamiento ha ayudado a que te pongas en emociones diferentes, algunas incluso extremas porque es una película muy gorda la que estamos viviendo aunque la estemos normalizando, que te lleva a veces a lugares tuyos de puro optimismo, a veces de lucha interna.”
Les planteamos también el juego que hemos hecho con algunos grupos durante el presente año, presentándoles diferentes pares de canciones para ver cuál escogerían para versionar y llevar a su terreno. Comenzamos por la pareja entre el “Ave María” de David Bisbal y el “Sólo se vive una vez” de las Azúcar Moreno, en la que, tras alguna risita, responden casi al unísono el tema de las azúcar moreno “de calle además”.
Por otra parte, entre el “La La La” de Massiel o el “Vivo Cantando” de Salomé, también creen que podrían sacarle más partido al segundo de ellos.
Siguiendo con las preguntas off-topic, preguntamos qué preferirían viajar, al pasado o al futuro, en caso de tener una máquina del tiempo. Mientras que Iván viajaría al futuro, David cree que iría al pasado, a lo que Iván bromea: “Lo bueno de viajar al pasado es que sabes que no hay contaminación y que la carne que tendrían que comer estaría buenísima”
Por último, cerramos esta entrevista con la clásica Ronda rápida de preguntas necesarias antes de poder juzgar a nadie:
¿Sois de los que mandan audios de WhatsApp, o mandáis podcast?
Ambos: “Odio los audios.” Iván añade: “Además, hay gente que habla muy lento y digo, no sé cómo se espera esta persona que me lo escuche entero. Aclárate y resúmemelo en tres p**as líneas” (risas)
¿Películas o series?
David: Película
Iván: Película
¿Cerveza o vino?
Iván: Vino
David: Vino
¿Pizza con piña o sin piña?
Iván: Sin piña
David: Sin piña
¿Colacao con grumos o sin grumos?
Iván: Con grumos
David: Uf yo no puedo.
¿Ventana o pasillo?
Iván: Ventana
David: Ventana
¿Los bordes de la pizza se comen o no se comen?
Iván: Yo me los como
David: Yo no
¿Ketchup o mostaza?
Iván: Mostaza
David: Mostaza
Por último la menos original pero más importante: ¿la tortilla de patatas con o sin cebolla?
Iván: Sin cebolla
David: Con cebolla

Dejamos en manos de los lectores el veredicto final. Nos despedimos dando las gracias a Zirconita por compartir esos minutos con nosotros y a All Sounds por abrirlos las puertas de su oficina una vez más. Recordamos a todos que Paradero está disponible en todas las plataformas digitales y os invitamos a disfrutarlo para ir preparando la vuelta a la normalidad (al menos en lo que a lo musical se refiere).
Nos vemos en la próxima antigua normalidad,
Fran Salamanca